Monte Nokogiri o Nokogiriyama (鋸山)

Hoy vamos a hablar un poquillo más en profundidad del Monte Nokogiri (鋸山), una preciosa excursión desde Tokio. Yo creo que es la que más me ha gustado (de momento). Lo suyo es madrugar e ir tempranito ya que el camino es largo y lento para llegar hasta allí.

Nokogiriyama (鋸山) es una montaña de 330 metros en la costa occidental de la península de Bōsō en el sur de la Prefectura de Chiba. Su nombre significa monte de sierra. Se encuentra frente al canal Uraga, la vía fluvial que conecta la bahía de Tokio y el golfo de Sagami. Las características distintivas del monte Nokogiri son sus crestas en forma de diente de sierra (de ahí su nombre). Éstas fueron creadas por la extracción de piedra de construcción durante el período Edo.

Extendiéndose a lo largo de las laderas de la montaña se encuentra el Templo Nihonji (日本 寺), un templo budista Sōtō Zen (曹洞宗). Fue construido en el año 725, que hace de éste uno de los templos más antiguos de la región de Kantō.

El complejo del templo es extenso y consta de múltiples áreas. Una red de senderos para caminar conecta las áreas que nos llevará toda una mañana recorrerlos y disfrutarlos.

Aquí les dejamos un plano sacado de la web oficial del Templo Nihonji (en japonés): http://www.nihonji.jp/

Templo Nihonji (日本 寺).

Se inauguró el 8 de junio del año 725 por el emperador Shōmu Tennō y por el sacerdote Bosatsu Gyōki (行基). Primero perteneció a la secta Hosso, luego a la secta Tendai y después a la secta Shingon. Se convirtió en la secta Sōtō Zen durante el reinado del tercer shōgun Tokugawa Iemitsu cuando se convirtió en un centro de práctica Zen.

En la región de Kantō, Nihon-ji es el único templo del Periodo Nara construido por decreto imperial (tales templos se conocían como chokugansho (勅 願 所)). Algunos documentos antiguos cuentan que el emperador donó al templo 18 toneladas de oro. Una tableta imperial escrita por el propio emperador y un pergamino que representa 33 imágenes de Buda bordadas personalmente por la emperatriz Kōmyō.

Según los monumentos históricos de piedra que aún existen en la actualidad, el templo constaba de siete santuarios, doce edificios monásticos y cien logias para sacerdotes.

La fama del templo alcanzó su máximo apogeo en el período Edo (1603-1868), sobre todo bajo el gobierno del tercer shōgun, Tokugawa Iemitsu. Fue en 1774 que Guden (愚 伝), el sacerdote principal de Nihon-ji, amplió el templo y convirtió a Nokogiriyama en una montaña sagrada. El Nihon-ji Daibutsu y los 1.500 arhat se agregaron a la ladera sur en ese mismo período. El templo sufrió considerablemente a raíz de la Restauración Meiji, cuando el haibutsu kishaku (廃 仏 毀 釈), un movimiento anti-budista, resultó en una gran destrucción de la propiedad del templo. Muchos de los arhat fueron decapitados, pero luego restaurados.

Escultura de un Arhat.

La deidad principal del templo es Yakushi Ruriko Nyorai (Buda de la medicina). Originalmente venerado únicamente por soberanos gobernantes y élites judiciales por sus propios beneficios personales (para curar enfermedades que amenazan la vida), Yakushi se convertiría más tarde en la deidad central en los ritos del siglo VIII para garantizar el bienestar de todo el reino. A principios del siglo IX, la deidad también fue llamada para aplacar a los espíritus vengativos que causan calamidades. La característica principal es que tiene un frasco de medicina en la mano izquierda.

Se dice que Yakushi Ruriko Nyorai cura las heridas de guerra, así que numerosos mandos militares han visitado este templo. Después de perder la batalla del Monte Ishibashi, Minamoto no Yoritomo rezó por suerte en el Templo Nihonji.

Inmediatamente después de iniciarse el Shogunato de Kamakura, Minamoto no Yoritomo se dedicó a la demolición de todos los templos japoneses que estaban en mal estado, y reconstruyó el Yakushi Honden en el primer año de Yowa (1181). El Templo Nihonji, que fue completamente renovado por Yoritomo, sería devastado nuevamente debido al fuego continuo de la segunda mitad del Shogunato de Kamakura, pero Takashi Ashikaga lo reconstruirá nuevamente en el siglo XIV. También fue reconstruido de nuevo en el siglo XVI por el clan Satomi, los señores de la guerra locales de la provincia de Awa.

Visitando el Monte Nokogiri

La entrada más común y popular es la que se hace a través del teleférico situado en la ciudad de Kanaya.

Es conveniente llevar agua ya que sólo encontraremos agua en las máquinas expendedoras que se encuentran junto al Gran Buda y junto a la salida del teleférico.

Los únicos baños públicos se encuentran también muy cerca del Gran Buda.

El precio de la entrada (2020) es de ¥600 para adultos y ¥400 para los niños.

Área de la cumbre (山頂エリア)

Entramos desde la estación del teleférico, en la que hay máquinas expendedoras de bebidas y un pequeño restaurante.

Desde este punto tenemos unas vistas espectaculares del área que rodea Kanaya y de Hota.

Kanaya.
Hota.

Desde aquí parte el sendero que llega hasta la puerta en la que pagamos nuestra entrada y nos dan un mapa y un panfleto informativo.

Subimos como un millón de escalones llegamos a la espectacular y gigantesca escultura de 30 metros de Hyaku-Shaku Kannon (百尺観音). Aunque tiene aspecto de llevar siglos aquí se talló entre 1960 y 1966 para conmemorar las víctimas de la Segunda Guerra Mundial y de accidentes de tráfico. Es venerado como una deidad para proteger la seguridad del transporte náutico, aéreo y terrestre.

Hyaku-Shaku Kannon (百尺観音)

Después de subir como otro millón de escalones con el tremendo calor húmedo de julio, llegamos a la zona del mirador Jigoku Nozoki (地獄のぞき), la “Vista al infierno”. El mirador más famoso y espectacular de Nokogiriyama, ofrece impresionantes vistas de la península de Bōsō y el canal de Uraga. Al otro lado de la bahía, se puede ver la península de Miura y, en días claros, el monte Fuji. Consiste en un pequeño saliente en la montaña desde las que hay unas vistas realmente espectaculares mientras pareces estar suspendido en el aire. Hay que hacer cola para poder acceder ya que, desde enfrente, te puedes sacar unas fotos muy chulas en el mirador.

Jigoku Nozoki (地獄のぞき), la “Vista al infierno”.

Área de Rakan (羅漢エリア)

Después de sacarnos las fotos de rigor comenzamos la bajada. La hacemos por el camino principal, el camino de los 1.500 arhats (千五百羅漢).

En el budismo, arhat es alguien que ha ganado el entendimiento profundo sobre la verdadera naturaleza de la existencia, que ha alcanzado el nirvana y por ello, no se reencarnará.

Esculturas de Arhats.

Al igual que Arhat en otras partes de Asia, se asemejan al brillante conjunto de figuras de Li Guangxiu en el Templo de Bambú en las afueras de Kunming en China: cada expresión facial es diferente, desde el beatífico hasta el La tradición sostiene que si comienzas a contar tu propia edad a partir de una figura determinada, llegarás al Arhat que más se asemeja a tu propio carácter y tu ser interior. Puede que no te guste lo que encuentras.

Pues bien, en la ladera del monte existen las imágenes en piedra de 1.500 Tokai Arhats, hechas por el artista Jingorō Eirei Ōno y sus 27 alumnos durante 19 años (entre 1779 y 1798), talladas en una piedra especial traída desde la península de Izu. Estos Tokai Arhats se encuentran en pequeñas cuevas naturales y sobre rocas talladas. Desafortunadamente, muchos fueron destruidos durante un Movimiento Anti-Budista en el período Meiji, entre 1868 y 1873, quedando su número reducido a 538. Es por eso que a veces solo quedan algunas partes de las estatuas. Recientemente se restauraron muchas de ellas.

Monte Nokogiri

El camino de bajada es una auténtica pasada, con las esculturas en el espectacular entorno boscoso del monte, haciéndote hasta olvidar el tremendo calor veraniego.

Explanada del Gran Buda de Nokogiri (大仏広場)

A media altura de la montaña encontramos la joya del templo: la estatua del Gran Buda de Nokogiri o Nihon-ji Daibutsu (日本寺大仏).

Originalmente fue tallada en la misma roca en la que se encontraba en 1783 (tercer año de Tenmei) por Jingorō Eirei Ōno y sus 27 alumnos y medía 37 metros. En el final del Periodo Edo (1603 – 1868), debido a la erosión del viento y la lluvia, se derrumbó. La escultura que hoy contemplamos data del año 1969 y mide 31 metros, 7 menos que la original.

Se eleva desde una base semicircular, en forma de brotes de loto superpuestos, hasta una aureola de piedra que se asemeja a un disco y con “pequeños” Budas rodeando a Yakushi Ruriko Nyorai.

La escultura es espectacular y te deja sin habla. En la explanada hay una especie de merendero a la sombra donde puedes descansar a la sombra y tomarte algo fresquito sacado de una de las máquinas expendedoras que se encuentran aquí.

Zona media (中腹エリア)

Después de un merecido descanso comenzamos de nuevo la bajada pasando por varios edificios del templo, como el Yakushi Honden (薬師本殿医王殿), destruido por el gran incendio de 1944 y reconstruido en 1997.

Yakushi Honden (薬師本殿(醫王殿).

Área de Omotesando (表参道エリア)

Ya en la parte más baja, podemos encontrar el estanque Shinji-ike (心字池) y algunos edificios más como el Kannondou (観音堂).

Kannondou (観音堂).

Aquí termina la ruta del Monte Nokogiri, de unas dos horas aproximadamente. Una excursión que no te dejará indiferente.

Para volver a Tokio, lo más práctico es tomar el tren desde la estación JR Hota, que se encuentra a unos 20 minutos andando entre cultivos de la entrada al complejo del monte, hasta la estación JR Hama-Kanaya y allí volver a tomar el barco hacia Kurihama.

Cómo llegar al Monte Nokogiri

Para llegar al Monte Nokogiri desde el centro de Tokio, lo mejor es desplazarse hasta la estación de Shinagawa (品川駅).

Desde Shinagawa, si tienes JRPass, lo mejor es coger la línea JR Yokosuka por Kurihama, hasta la estación JR Kurihama que tarda 1 hora y 20 minutos. Sin JRPass, el precio es de ¥940.

Si no dispones de JRPass, lo mejor es coger la línea privada Keikyu Main Line, que un poco más adelante, en la estación Horinouchi, se convierte en la Keikyu Kurihama line (no hay que bajarse del coche), también desde Shinagawa hasta la estación Keikyu-Kurihama. El trayecto dura 1 hora y 9 minutos y cuesta ¥800.

Si vamos con JR, desde la estación Kurihama tenemos que caminar hasta la estación Keikyu-Kurihama, que está justo enfrente. En la entrada principal, nos subimos al bus número 7 o número 8 hasta la parada Tokyowan Ferry, junto a la terminal del ferry. El trayecto dura unos 12 minutos y cuesta ¥200 (1.55€).

La empresa encargada de los ferrys es Tokyo Wan Ferry y su página web es: http://www.tokyowanferry.com/

Los precios de los billetes son (2022):

Viaje de idaViaje de ida y vuelta
Adultos¥900¥1.600
Niños*¥450¥800
*Niños hasta 12 años.

El trayecto en ferry dura unos 40 minutos y llegamos al puerto de Kanaya en Chiba.

Se puede llegar al monte Nokogiri por el teleférico de Nokogiri, a unos 13 minutos andando desde el puerto o 10 desde la estación JR Hama-Kanaya.

Los precios de los billetes son (2022):

Viaje de idaViaje de ida y vuelta
Adultos¥500¥950
Niños* y reducido¥250¥450
*Niños hasta 12 años.

Tarifa para grupos de 25 personas o más(2022):

Viaje de IdaViaje de ida y vuelta
Adultos¥450¥850
Niños*¥230¥410
*Niños hasta 12 años.

Los horarios son de 9:00 a 16:00 entre el 16 de noviembre y el 15 de febrero (invierno) y de 9:00 a 17:00 del 16 de febrero al 15 de noviembre.

También se puede llegar subiendo los más de 2.600 escalones desde el Templo Nihon-ji (a 20 minutos a pie de JR Hota).

Para más información puede visitar la web oficial http://www.mt-nokogiri.co.jp/

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